martes, 19 de agosto de 2008

Los Ases del Juego del Futbol Mundial (Artículo Don Balón)


En el fútbol, como buen juego que se precie, el azar es un factor influyente. Pero los técnicos que dominan la escena internacional creen poco en la fortuna. Cada uno a su manera, reina por encima de la suerte.

Las cartas están sobre la mesa y las inversiones son de lo más cuantiosas. Ahora, todo depende de cómo cada cual sepa gestionar las suyas para comprobar si la apuesta acaba reportando suculentos beneficios o, más bien al contrario, se demuestra ruinosa. La partida que se inicia en estas fechas veraniegas, resulta duradera y compleja, con varias manos en las que arriesgar y con momentos en los que es mejor nadar y guardar la ropa, aunque al final, la diferencia siempre la marque la pericia del jugador. Éxito o fracaso. Todo depende de los ases del juego: los entrenadores.



Su figura se ha engrandecido de manera considerable en los últimos tiempos. El hecho de comandar un conjunto de élite se ha convertido en una tarea compleja que requiere un dominio multidisciplinar y en la que, en muchas ocasiones, los planteamientos estrictamente futbolísticos no encabezan el orden de prioridades a la hora de actuar. Equilibrar sus plantillas manejando un presupuesto del que puede depender la viabilidad futura del club. Gestionar un grupo humano en que las batallas de egos pueden arrasar con todo. Pacificar el entorno y crear movimientos de opinión positivos que soplen a favor del equipo. Ayudar en el diseño del nuevo estadio del club, supervisar el menú de los futbolistas o construir un plan director bajo el que encauzar el trabajo de formación. Sus agendas se han ido rellenando de todo tipo de responsabilidades, en la que elegir el once cada domingo es tan sólo una obligación, a veces, menor. Son ellos a los primeros que se acusa cuando las cosas no funcionan, pero la gran diferencia es que ahora, son también ellos a los que se señala como ídolos absolutos que fraguan la gloria. Y el último ejemplo de Luis Aragonés es más que paradigmático.



Banquillos con denominación de origen

La Italia de Lippi, el Liverpool de Benítez o el Madrid de Capello. Sus nombres, cual denominación de origen vinícola, marcan a fuego a sus equipos, haciéndolos reconocibles aunque cambiaran el color de sus camisetas. Cada uno con su estilo, esbozan el perfil que representa a toda una institución o a todo un país y, por lo tanto, su elección es siempre crucial. Sólo en la pasada temporada se suceden los ejemplos. En Valencia, no tenían suficiente con lo aportado por Quique y llamaron a Koeman. El holandés dejó al club al borde del descenso y ahora, los de Mestalla deben hacer frente, además de a la descapitalización moral, también a la financiera.



En Inglaterra, trataron de saldar la crisis que supuso su no clasificación para la Eurocopa con la contratación de Fabio Capello. El resultado de la apuesta está todavía por comprobarse, pero si la gran sangría del fútbol británico era la superpoblación de extranjeros en la Premier League y el continuo estado de tensión que debía soportar el equipo, no parece Capello la persona que responda al perfil idóneo, como italiano y polemista.

El hombre que maneje tus naipes es, cada vez más, el responsable absoluto de tu suerte. ¿Mediador o tirano? ¿revolucionario o conservador? ¿bohemio o científico? ¿improvisador o calculador? Don Balón analiza a los ases más influyentes de la baraja, diseccionando sus características, para que a la hora de la verdad, cada uno sepa lo que se apuesta y con quien se lo apuesta. Cuatro pókers de entrenadores que dominan en todas las mesas del planeta. ¡Hagan juego¡



¡DESCUBRE EN LA REVISTA LOS SECRETOS DE LOS ASES DE LOS BANQUILLOS!

No hay comentarios: